sábado, 14 de noviembre de 2009

Celebraciones y declaraciones de Marcelino Zevallos

Estuvimos en la cancha y podremos apreciar también la celebración del DIM en vestuarios, con las declaraciones de Marcelino Zevallos, volante del Deportivo Independiente Miraflores.

El equipo que vi hoy


Derportivo Independiente Miraflores demostró jerarquía y empuje, derrotando a la UNAP por 3-0, logrando de ésta manera el pase a los cuartos de final en donde podría enfrentar a la Rural de Surco o al Tecnológico Campo Verde de Pucallpa.

La crónica

Resulta algo extraño ir a un partido de un equipo del cual todavía no soy hincha acérrimo. Ante eso podría plantear dos buenas respuestas para explicar el porqué de mi asistencia al Niño Héroe Manuel Bonilla, la tarde de hoy.

Diría que estaba con deseos de ver fútbol. Ese fútbol en donde las canchas no son buenas y donde el coraje sale a relucir. Donde las puteadas, golpes y vivezas son ingredientes característicos del partido.

Diría que me enteré de la existencia de un equipo de Miraflores, distrito en el cual viví hasta ahora que tengo 23 años, y que quise ir a alentarlo empujado por esas vivencias en el distrito.

El estadio de una sola tribuna, ubicado en la avenida El Ejército lucía espectacular. Faltaba poco para un lleno total. No había que preocuparse por el vandalismo que es noticia en el acontecer nacional, felizmente.


La fiesta estaba por empezar. En los primeros minutos el partido se mostraba disputado en el mediocampo, corría mucha pierna fuerte y los ánimos se calentaban. Pero el gol no demoró mucho, ya que la presión miraflorina se haría sentir, luego de una falta en el área que fue bien cobrada por Miguel Magallanes, árbitro del encuentro. Penal. José Vela, encargado de ejecutar la falta, patea, y aunque el arquero Lomas de la UNAP logró rozar la pelota no pudo hacer nada. Fiesta en el Bonilla. Papel picado y aliento incondicional.

El gol haría que los nervios aumenten para la UNAP, a los 39’ una falta confusa en la mitad del campo haría que el árbitro expulse a Paolo Diaz (UNAP) y Wilmer Sáenz (DIM). Las puteadas y amenazas no pararon por largos minutos, ya que el público consideraba que la expulsión del número 10 del DIM, Wilmer Sáenz, era poco justa.

En el segundo tiempo comenzaría el show de Carlos Peralta. El ‘chato’ Carlitos Peralta simplemente la rompió. Amagues inteligentes y habilitaciones importantes durante el partido, cerrando una buena actuación con el segundo gol para DIM. Habría que hacer un llamado a la Municipalidad de Miraflores para que arregle la cancha del Manuel Bonilla, eso permitiría que el juego del buen Carlitos sea aprovechado en pos del equipo. Bien pagada la entrada y recién iba 2 a 0.

Ya cuando se acababa el partido, Danny Uribe sellaba la goleada. De cabeza, en la pelotita parada, el defensor central se sumó al ataque y no desaprovechó la oportunidad.

Bengalas, júbilo, papel picado, gritos de apoyo. “Vamos DIM”, decía la gente. Por Miraflores, por su gente, porque el equipo irá paso a paso en búsqueda del objetivo.